lunes, 26 de agosto de 2013

Capítulo 14

   Era un sitio precioso. Estábamos entre árboles que nos daban sombra pero también llegaban rayos de sol. Se oía el canto de los pájaros, el sonido del agua del riachuelo que llegaba a un lago.
(Lo)- Este es nuestro escondite. ¿Te gusta?
- Me encanta.- Montamos las tres tiendas de campañas. Louis dormiría con Zayn, Harry con Niall y yo con Liam. Niall nos echó miradas. Luego nos acercamos al lago y nos dimos un baño. El agua estaba un pelín fría pero pronto nos acostumbramos. Al salir del agua, nos cambiamos y fuimos a buscar leña. Ibamos todos juntos pero Liam me tiró de la mano y nos escondimos de tras de un árbol.
(Li)- Shhh...-miro a los chicos- te quiero enseñar una cosa.- Comenzó a correr en distinta dirección a los demas. Yo tenía que seguirle ya que todavía me agarraba de la mano.
- ¡No corras tan deprisa!- moderó el paso. De pronto se paro y me choque con él. Había un hermoso prado.
(Li)- Mira, mira bien. ¿Has visto algo, algo diferente?- negué con la cabeza.- Mira, todas esas margaritas sois las directioners. Todas sois igual de hermosas. Pero fíjate bien. Hay una que destaca, nadie lo ve pero yo lo veo y ese eres tú.- Le abracé. Nunca nadie me había dicho algo tan bonito. Luego salté encima de el. Me tenía en aupas. Se sentó, y yo me encontraba sobre él. Liam apartó el los pelos que tenía en la cara y lo besé. Nos besamos como si no hubiese un mañana.

   De pronto algo nos interrumpió. Eran unos pasos. Nos sepaeamos los labios pero no me dio tiempo de quitarme de encima suyo cuando apareció Niall. Liam le echó una mirada que daba miedo.
(N)- Tranquilo chico... Voy a dejaros unas ramas para que uno que sabemos no se cabree. Y no tardeis mucho.
(Li)- Gracias Niall.- Le sonreimos y el dejó algunas ramas antes de desaparecerse entre árboles. Liam y yo nos quedamos mirando durante varios minutos antes de volver a donde los demas. Fuimos agarrados de la mano. Llegamos a donde los demas. Todavía faltaban Harry y Louis, se habían perdido y tuvimos que ir a buscarlos. A la noche nos sentamos al rededor del fuego. Niall cogió su guitarra, y comenzó a tocar, entonces fue cuando comenzaron a cantar esa perfecta canción, Little Things. Así fue pasando la noche el cielo lleno de estrellas, al calor del fuego, oyendo las voces perfectas. Esto era mejor que ningún concierto, algo que no podría olvidar nunca.

   Estaba apoyada encima de Liam cuando me saltaron las lágrimas de la emoción. Harry se paró de golpe.
(H)- ¿Por qué lloras? ¿Lo estamos haciendo mal?
- Es justo lo contrario. Lo estais haciendo genial. No podría pagarlo mejor. Es mejor que escuchar los CDs o las canciones por el móvil. Es que es en directo. Siento vuestra voz.
(Z)- Como en los conciertos. También lo hacemos.
- Lo sé, pero...- nunca estuve en ningún concierto y esto era demasiado para mi. No tuve tiempo para asimilar, pensar, todos los acontecimientos se me acumulaban hasta que estallé. Comencé a llorar, no sabía porque, pero empecé. Liam me cogió en brazos, yo me acurruqué en el, mientras que nos separábamos del grupo. Liam les dijo que siguiesen y así lo hicieron. Nos acercamos a la orilla del lago.
(Li)- ¿Qué te pasa? Y no me digas que nada porque te echo al agua.- Le expliqué todo lo que me pasaba y me dijo que me fuese a la cama a descansar y a pensar.
- Pero no dejéis de cantar, por favor. La música es la mejor medicina, como todos lo sabemos.
(Li)- ¿Algo más señorita?
- Un besito no tendras...
(Li)- ¿Para ti? Miles.- Nos besamos. Nos acercamos al grupo. Les di las buenas noches, le di un beso a Liam y entre a la tienda.

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